Para algunos que leen estas líneas deben sentir asombro o molestia el volver atrás, a parir en la casa, tanto esfuerzo en mejorar los resultados perinatales, ¡nada menos que la barbarie!
Sin embargo, es necesario estar permanentemente cuidando nuestros sesgos y no olvidar que no lo sabemos todo. El parto en casa es la opción que mas integra la fisiología del parto y nacimiento, es la que potencialmente cumple los requisitos para la vivencia del parto y la liberación adecuada de hormonas.
Muchos países de Europa tienen incorporada esta opción dentro de sus sistemas de salud para sus ciudadanos, para gestantes de evolución fisiológica, asistidos con profesionales idóneos y sistemas de derivación integrados.
La decisión del parto en casa es de índole personal e íntima de la mujer informada. Las mujeres que han vivido la experiencia de parto en casa lo describen como “una experiencia máxima”, asimismo los profesionales que asisten partos en casa, señalan que son momentos que “unen el cielo con la tierra”.
Es importante tener muy claro que en nuestro país, el parto en casa no está considerado como una opción válida desde los sistemas de salud, los seguros, los profesionales de salud y el marco legal. Sin embargo el cambio de paradigma esta a las puertas.
Los países donde el parto en casa está implementado exigen cumplir condiciones que se describen a continuación:
- Gestaciones sin patología, de curso completamente fisiológico.
- Gestaciones de término
- Madres informadas
- Asistencia profesional del parto.
- Debe existir coordinación, información y flujos de derivación expeditos con la maternidad próxima
- El lugar del parto debe estar en condiciones higiénicas y cómodamente implementado, además estar cercana a la maternidad próxima en caso de requerirse derivación
En conclusión el parto en casa es una opción para las madres que cumplen los requisitos y que han escogido esta vía, nuestra obligación es asistirlas y cuidarlas. rednace